POLITICA

01 - Sep -2021 - 10:44

MILEI Y SUS VÍNCULOS CON LA DICTADURA CÍVICO-MILITAR EN ARGENTINA

El auto denominado defensor de "la libertad" y hoy candidato a diputado Javier Milei presentó sus listas oficiales para las elecciones porteñas. Con apoyo de Gómez Centurión y otros destacados referentes de la ultra - derecha, introdujo candidatos de corte netamente fascistoide y pro - dictadura. De esta manera deja representado su pasado y sus vínculos con la dictadura cívico-militar en la argentina. La candidata que le sigue en la lista es Victoria Villarruel, una referente del discurso negacionista y pro-dictadura. Es autora de dos libros que niegan el genocidio llevado adelante por el Estado tras el golpe del 24 de marzo de 1976: "Los llaman jóvenes idealistas" y "Los otros muertos: víctimas civiles del terrorismo guerrillero de los 70". Villarruel levanta las banderas de "valores fundamentales como la familia, la libertad, el derecho a la vida" al igual que el referente anti – derechos Gómez Centurión. Es abiertamente simpatizante de agrupaciones como la española Vox, que reivindica la dictadura franquista. María Fernanda Araujo, ocupa el cuarto puesto en la lista y preside la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas, también dirige la seccional porteña de NOS, el partido de Gómez Centurión. Cabe recordar que este último, participó de los alzamientos carapintadas y tuvo un puesto en la Aduana bajo gestión de Mauricio Macri. Milei ha agrupado a referentes con el mayor nivel reaccionario de la escena política argentina y quienes han sostenido el relato de la última dictadura como una respuesta a la supuesta "amenaza terrorista" reivindicado los delitos de lesa humanidad perpetrados por los gobiernos golpistas. Grita, insulta, subestima, denigra y se mueve con soltura en las redes sociales y en muchos de los medios de comunicación. "Revolución", "sistema", "odio", "zurdos de mierda", son palabras que abundan en cada uno de sus discursos. Esconde, para algunos/as, la defensa empresarial y el odio clasista, el odio hacia lo popular y el desprecio hacia las mujeres. Ese es Milei, un personaje que parecería caricaturesco, pero no lo es. Peligra el sentido democrático en sus dichos. Defiende la flexibilización laboral y peligran los sindicatos como forma más representativa de los trabajadores y trabajadoras y como la única herramienta que conduce a la conquista de derechos. El candidato a diputado por la Ciudad Autónoma de Bs. As. por el FdT Leandro Santoro ha puesto luz desde las redes sociales sobre este nefasto "personaje", resabio de la época más oscura y dolorosa del país: "Javier, cobraste del estado y trabajaste para un genocida q gobernó con estado de sitio una provincia donde instrumentó un plan de exterminio. ¿Con que cara te quejas ahora de las restricciones de la cuarentena? No podes hablar más de libertad. Dale explicaciones a los q te siguen", disparó el candidato. En otro envío en su cuenta de twitter, Santoro detalló: "Insultas a la política y al estado pero eras empleado público. Hablas de la libertad, pero estabas contratado con el genocida Antonio Domingo Bussi en el Congreso. Y además trabajas en una contratista de obra pública del estado". Durante una nota en El Destape radio, remarcó en relación a la temática: "El problema y el peligro es que ciertos jóvenes creen en lo que dice, y uno se pregunta ¿están escuchando bien?. Si bien es cierto que uno tiende a identificar a toda la derecha como todos iguales, no es así. La pérdida de matices es propio de una conducta autoritaria". Es fácil señalar a Milei como liberal porque él mismo se autoproclama "liberal libertario" –interesante oxímoron, como decir "conservador revolucionario". Tampoco es complejo argumentar que buena parte de la imaginería liberal se sostiene sobre falacias y premisas equivocadas, sobre actos violentos y actitudes perversas. Lo complejo de entender es a quienes le dan sostenidos espacios mediáticos pareciendo acordar acuerdan con las posturas librecambistas que favorecen las libertades de mercado, sobre todo las de los grandes monopolios. Cabe recordar que el represor Antonio Domingo Bussi, fue uno de los más duros y crueles integrantes de la dictadura cívico-militar. Al momento de su fallecimiento en 2011, cursaba condena a prisión perpetua por la desaparición y posterior asesinato del senador justicialista Guillermo Vargas Aignasse. Tras el Golpe del 24 de marzo de 1976, Bussi fue nombrado gobernador de la provincia de Tucumán y según un informe de la Comisión Bicameral Investigadora de las violaciones de los Derechos Humanos en la provincia de Tucumán su gestión fue calificada como "un vasto aparato represivo, que orienta su verdadero accionar a arrasar con las dirigencias sindicales, políticas y estudiantiles".