POLITICA

15 - Jun -2023 - 11:27

LA CANIBALADA DEL PERONÓMETRO

El peronómetro es un aparato increíble y sofisticado, permite medir quién es peronista y quién no o establecer el grado de peronismo de cualquier ser mortal, determinar si un peronista es más peronista que otro; si vivió más o menos actos políticos u ocupó cargos; permite establecer la profundidad intelectual peronista en tanto se conozcan de memoria los discursos de Perón. Y su más fabulosa capacidad es la de "filtrar" peronistas y kirchneristas para esmerilar a estos últimos a su mínima expresión partidaria. También mide con precisión la lealtad, la pasión, el fervor, la mística y la pertenencia. En su parte inferior trasera, cuenta con un certificado de autenticidad bajo la leyenda: "para un peronista no hay nada mejor que "medir" el nivel de otro peronista". No es un tema menor que ciertos sectores del peronismo consideren que el kirchnerismo no es peronismo. Queda en ese tenor la idea tácita de afirmar que la dupla Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner no son peronistas. Algo inexplicable si se mira la larga trayectoria política de ambos y más inexplicable si se considera que sus apariciones en la escena nacional dieron una fuerte inyección a la renovación y modernización del peronismo. Ese peronismo dormido y sin sueños, ese peronismo golpeado por el menemato, ese peronismo sin jóvenes, ese peronismo que luego volvió a entrar hasta de prepo en la historia para volver a levantar banderas de la igualdad social. "Yo nunca en mi vida jugué en contra de un Presidente peronista como sí han hecho otros compañeros que jugaron en contra de Alberto. Le hicieron la vida imposible, mis diferencias con ellos no tienen solución". No tiene la menor importancia el autor de la cita. Lo irrevocable es el contenido, la confusión entre lo "imposible" y lo posible de las diferencias en cuanto a las estrategias de gobierno. Lo inédito es la falta de apertura y el negacionismo ante quienes aportaron un triunfo electoral, aún a sabiendas que el elegido no era justamente un gladiador de las buenas opiniones públicas hacia quien comandaba y comanda el espacio. Pero claro, en 2019, nadie hizo reclamos. "Determinadas políticas, actitudes, gestos mezquinos y aprovechados y ventajeros, no tengo relación con determinado segmento, pero con todo el resto sí". Sigue sin importar el autor. ¿Quiénes serán el resto? ¿El resto de qué? Dos segmentos son consecutivos cuando tienen en común únicamente un extremo. La suma de dos segmentos es otro segmento que tiene por inicio el origen del primer segmento y como final el final del segundo segmento. "Es muy difícil tener un candidato único cuando cada uno se aferra a sus posturas... hay que someterse a la democratización". Sigue sin importar el autor que infiere, por cierto, en la contradicción. La mezquindad se disfraza de democratización y deja a la vista "el cuando me conviene elige la gente, cuando no, no". A veces, los que se mueven con el peronómetro en la mano, solo son funcionales al adversario.