SOCIEDAD

26 - Sep -2023 - 15:12

RAMIRO MARRA ALINEADO CON MAURICIO MACRI: EL NEGACIONISMO DE LA INDEPENDENCIA

"Soy español y no me gusta cómo se cuenta la historia, dijo Ramiro Marra, candidato a Jefe de gobierno porteño por la Libertad Avanza que conduce Javier Milei. El dirigente, defendió su condición de nieto de inmigrantes para autopercibirse español y atacar el contenido pedagógico del canal infantil Paka Paka. "Vamos a privatizar como se privatizaron otros canales de televisión y también lo haremos con la TV Pública", lanzó el candidato y agregó: "Un chico me dijo una vez que en Paka Paka decían que los españoles eran los malos y que los argentinos eran los buenos. Me parece que no es así. Paka Paka cuenta esas cosas. Yo soy español, tengo pasaporte español, mis abuelos son españoles, ellos no eran malos y yo no soy malo. Yo soy argentino y español", lanzó el candidato y agregó: "¿Entonces yo soy parte de un país que hizo las cosas mal?, no entiendo a dónde quieren llegar. A mi me contaron la historia de otra manera, este es un país que en su Constitución dice que recibe a toda la gente que quiere vivir en él. No me gusta contar la historia ni la parcialidad que pone Paka Paka". No es la primera vez que Marra admite que no conoce aquello de lo que opina. Días atrás había denostado a la señal infantil de producción nacional admitiendo que él no había visto ningún programa sino que se guiaba por lo que su madre le había contado acerca de lo que se emite y que desde la señal se "bajaba línea". Cualquier televidente promedio que haya visto Paka Paka comprende que el contenido pedagógico de varias caricaturas que sintetizan hechos de la historia nacional se basa en un revisionismo histórico que lleva décadas en la Argentina. Con sus definiciones, Marra se acerca al expresidente Mauricio Macri, quien en su discurso durante la conmemoración de los 200 años de la Independencia dijo: "Estoy acá (en Tucumán) tratando de pensar y sentir lo que sentirían ellos en ese momento. Claramente deberían tener angustia de tomar la decisión, querido rey, de separarse de España". Quienes más defienden una valoración "supuestamente" neutral del colonialismo son sus apologistas. Hoy en día sonaría sospechoso hacer un llamado a estudiar el concepto de "genocidio" desde una perspectiva "libre de valores". Por dar un ejemplo, todo estudio sobre la Alemania nazi implica necesariamente un posicionamiento ético con respecto a víctimas, cómplices y victimarios. Algo similar ocurre en todo estudio histórico sobre el colonialismo. Negar este posicionamiento es caer en una ceguera política que no hace más que naturalizar, y en última instancia legitimizar las relaciones de poder que constituyeron el colonialismo. Categorías como el "colonialismo", deberían servir no sólo para mirar retrospectivamente al pasado sino también para tratar de entender el presente. En los últimos años, la relación entre globalización y hegemonía capitalista deja a la luz lo relevante de una perspectiva histórica para comprender la espacialización de nuevas relaciones de poder. Mucho ha cambiado desde "la época colonial", pero el legado de esa historia sigue estando entre nosotros/as. Lo que llamamos "colonialismo" hace alusión a una geopolítica basada en la violencia, en la discriminación pero, Marra lo niega. "El señor colonial se ha colocado como árbitro permanente entre colonizados", dice Joan Paul Sartre.