LOCKOUT,del ingles, significa "dejar afuera". La patronal de la carne ha dejado afuera a la mesa de los argentinos y argentinas. Los casi mil pesos que vale un kilo de carne, y en algunos cortes un costo superior, han desabastecido la posibilidad de compra de la mayoría. Tras anunciar el lunes por la noche, el presidente Alberto Fernández, la decisión de suspender por 30 días las exportaciones de carne vacuna para contener la presión sobre los precios que se viene registrando en los últimos meses, no tardó en llegar la respuesta de la Mesa de Enlace de entidades agropecuarias. A través de un comunicado, la comisión que integran la Sociedad Rural Argentina (SRA), Coninagro, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Federación Agraria (FAA) anunciaron que darán una conferencia de prensa en la que expondrán "el disgusto de los productores y nuestro rechazo a un cierre de exportaciones que sin duda perjudicará a toda la Argentina". También adelantaron que harán un lockout patronal que se llevará adelante desde el jueves 20 hasta el viernes 28 de mayo. En 2020, el presidente de la Cámara de la Industria de Carnes (Ciccra), Miguel Schiariti, había afirmado que el consumo "está cayendo desde hace bastante" y lo relacionó con la depreciación del poder adquisitivo ante la constante inflación. La evolución del consumo anual de carne vacuna por habitante evolucionó desde los 61 kilos de 2013, pasando por los 58,6 kilos de 2015, hasta los actuales 49 kilos aproximados per cápita. El descenso que se registra en los últimos doce meses se produce en un contexto del alza de las exportaciones del producto, que alcanzaron su participación más elevada de las últimas décadas. Claro es, pensar que los "intereses" de abastecer el consumo exterior tiene una mayor ganancia y un menor costo de producción, lo que ha generado un brutal aumento en el mercado interno; produciendo un doble desabastecimiento: uno por falta de poder adquisitivo en la compra ante el alza de los precios y otro por falta de una mayor oferta en cantidad de productos dentro del mercado. En los primeros seis meses de la pandemia, el lockout ganadero por el aumento de las retenciones y las lluvias de abril en la Pampa Húmeda generaron desabastecimiento y una primera estampida de precios; a eso hay que sumar que las curtiembres decidieron no pagar más por los cueros, lo que se tradujo en nuevas alzas; más la pérdida del poder adquisitivo del salario y de ingresos del sector informal, fue un cóctel explosivo para el consumo y un cóctel relajante para los grandes ingresos que se acumularon en los bolsillos de siempre.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
CORREO ELECTRONICO
Teléfono: 02323 - 427962
Luján - Provincia de Bs. As.
copyright 2016
Construido por
Lorna
Copyright2020
"La RUEDA se reserva el derecho
de anular los comentarios
que incluyan contenido ofensivo o
sin verdadera identidad del usuario.
Este sitio no se responsabiliza
de los dichos vertidos por los entrevistados-as."